La diferencia clave entre la medicina interna y la práctica general es que la medicina interna maneja enfermedades que los médicos generales no pueden tratar en su nivel de práctica, mientras que la práctica general trata enfermedades menores, identifica enfermedades graves y deriva a esos pacientes a centros especializados para su posterior tratamiento.
La práctica general es una subsección popular de la medicina que se ocupa de los problemas cotidianos y generalmente no graves de los pacientes y, si es necesario, los deriva a unidades de atención especializada. La medicina interna se ocupa de las dolencias más graves que los médicos de cabecera no pueden manejar en su nivel de práctica.